Odres Nuevos Evangelio 27 septiembre 2015 color

Lectura del santo Evangelio según San Marcos

En aquel tiempo, dijo Juan a Jesús:
–Maestro, hemos visto a uno que echaba demonios en tu nombre, y se lo hemos querido impedir, porque no es de los nuestros.
Jesús respondió:
–No se lo impidáis, porque uno que hace milagros en mi nombre no puede luego hablar mal de mí. El que no está contra nosotros está a favor nuestro.
El que os dé a beber un vaso de agua, porque seguís al Mesías, os aseguro que no se quedará sin recompensa. El que escandalice a uno de estos pequeñuelos que creen, más le valdría que le encajasen en el cuello una piedra de molino y lo echasen al mar. Si tu mano te hace caer, córtatela: más te vale entrar manco en la vida que ir con las dos manos al abismo, al fuego que no se apaga.
Y si tu pie te hace caer, córtatelo: más te vale entrar cojo en la vida que ser echado con los dos pies al abismo.
Y si tu ojo te hace caer, sácatelo: más te vale entrar tuerto en el Reino de Dios que ser echado al abismo con los dos ojos, donde el gusano no muere y el fuego no se apaga.
Palabra del Señor
 
 
Todo aquel que os dé de beber un vaso de agua por el hecho de que sois
De Cristo, os aseguro que no perderá su  recompensa.
 
El soplo de Dios se manifiesta dónde quiere, en quién quiere y cómo quiere. Es decir: que no solamente, los que vivimos cerca de Él, tenemos sus gracias y sus dones. Hay otras personas que, aunque puedan vivir apartadas del camino de la fe, también tienen semillas de amor y de justicia en sus corazones y en sus vidas. La arrogancia no es buena consejera si pretendemos que algunos de los nuestros se acerquen al Señor.